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Entrada al infierno

 Era marzo 1959 y yo estaba muy gorda, al fin el Nanhy me escribe y me dice estoy tomando una casa para cuando lleguen, el Mario y mi mamá me han dado muebles y cosas para que tengan donde llegar.   Yo creo que ahí volví a morir como cuando se gastó el Nanhy el dinero del auto, imaginen, Cochabamba, hermoso clima, buena comida.    Con mi mamá que me daba gusto en todo, yo la ayudaba claro y hacía todo lo de ustedes, la verdad era feliz, creo que ni me acordé que estaba casada, el Nanhy mandaba algo de dinero pero no sé cómo,  y llegar a  La Paz otra vez, subir otra vez cerro y esto peor, porque en el tiempo que vivimos  donde la Forno ya  estaban pavimentadas las calles, y esto era al otro lado, «Los claveles», fue un infierno.

Entrada al infierno y comienzo del fin del matrimonio. Pienso ahora, cuando ya he envejecido, que aquí comenzó todo, o yo abrí los ojos, esto es muy doloroso.   Cuando llegué a la casa por afuera parecía una casa normal, con rejas de madera verdes, un jardincito y a la entrada había un chorro de agua, pero seguimos  hacia abajo y llegamos al sótano  abrió  una puerta chiquita y bajita, angosta de madera sin pulir, entramos y era un living comedor con una grada se subía no era grande, oscuro, sin ventanas.

Aunque parezca mentira, recién me di cuenta años después como pude soportar todo eso, ya te dije que entramos a la casa se abría una  puerta y era un cuarto que después  hice el comedor, se seguía por un un pasillo estrecho y corto  a la derecha puse el living, al frente era la cocina  y adentro que daba a un patio estaban dos piezas que serían los dormitorios, uno para los tres y otro para tu padre y mío, eran unas habitaciones  horribles, pero dije dentro de mí , buscaré yo algo lo más pronto que pueda, ya te dije que a tu padre le habían regalado esos muebles, o sea estaba amoblado , los muebles eran buenos, los usamos hasta que me divorcié, acomodamos nuestras ropas o sea yo acomodé, los tres eran muy chiquitos pero se quedaron medio como yo , impresionados, porque no había una ventana, era  para   llorar y las paredes eran con cal nomas, sin pintar, espantoso, me dijo es lo único que pude encontrar, nadie quiere alquilar con hijos, yo ya no dije nada, la Cruza vendrá mañana me dijo, menos mal, pero claro yo no conté que ella se casó hacía como un año, cuando estábamos en obrajes todavía , cuando vino al día siguiente, estaba tan gorda como yo.

Esa noche nos entramos a dormir o sea la primera noche, en la mañana cuando despierto encuentro que todo nadaba en agua, las zapatillas, lo que estaba en el suelo, todo era un lago, corrí al cuarto de los niños y lo mismo.

Pobres hijos míos, dormían felices, no sabían lo que pasaba, los dejé durmiendo mientras yo recogía el agua con la Cruza, recogimos toda el agua y fui a  ver a la dueña de la casa, estaba cansada y furiosa, le dije que piensa señora , como nos alquila un departamento así? me dijo yo le dije a su esposo que había que sacar cada noche el agua del hueco que hay en los cuartos, porque tenemos una vertiente que se llena y rebalsa, él dijo no hay problema, a todo esto tu padre se había ido , yo dije aquí no me quedaré, buscaré algo, por supuesto el alquiler se había pagado adelantado, no tenía como moverme, al menos un mes, cuando apareció tu padre a comer, le dije vas a conseguir dinero porque yo quiero irme de esta casa, como has podido traernos aquí? me dijo no había otra cosa, bueno éste mes me quedaré pero en cuanto te paguen me das dinero para irnos a otra parte, fue pedir mucho, porque cada día el venía menos y llegaba tarde sin saber que habíamos comido, al final tuve que decirle a la Cruza que se vaya porque casi no había comida, llegó el cumpleaños de la Nadia número 3 o era 4? la cosa es que mi mamá le había hecho una falda  roja de diablo  fuerte y su blusa, blanca con mangas abullonadas, bella, me la dio como una semana antes, llegó el día del cumpleaños y no teníamos nada, quedaba un poco de leche y eso les di, hacía las 3 o 4 de la tade llegó mi mamá con masitas, y varias cosas de comer y un par de zapatos rojos para la Nadia, porque la niña hacia no sé cuántos días no se bajaba de la cama porque no tenía zapatos, los que tenía se habían deshecho yo le ponía sus medias y un polco  de lana que hice para que no se enfríe, cuando vio sus zapatos, se puso a reír  y se los puso ese minuto, por suerte estaban  a su medida, eran rojos, con un tiro que agarraba  bien el tobillo, así era mi vida de miserable, yo esperando que le paguen para poder tomar otra casa y te cuento algo tremendo, pasábamos días enteros con pan y una sopa que yo hacía de harina tostada, ahí he llorado para toda mi vida, encima llegaba cada noche y me despertaba, me ponía una cadena  en el aire sobre mi barriga y me decía, dime la verdad     que ese hijo es mío, te nacerá un monstruo , si mientes, no es mi hijo verdad?  Y así horas hasta que se     quedaba dormido porque estaba lleno de alcohol, ya verás cuando nazca me decía, yo moría de miedo.

Ese mes que era mi esperanza, sabes con qué me salió?, ni te imaginas, continuará… aunque creo que les  he contado.

          Era la hora de almuerzo  fin de abril, yo esperaba  ese día  desesperadamente, creí que llegaría y me daría   su sueldo para que consiga otro departamento, cuando llegó, como siempre los niños habían comido antes y estaban durmiendo la siesta, yo me senté después de servir la comida, atrás quedaron las entradas, sopas y segundos, más postre, ahora era solo un plato de algo, no me acuerdo nada de ese día excepto que antes que yo hable me dijo: hoy me ha pasado algo terrible, no sé cómo decirte, estaba llegando después de tres días   no había venido para nada, ni a dormir, me estaba olvidando esto, que estuve preocupada y no sabía qué hacer, y esperaba y esperaba , y se hicieron tres días, entro como si nada , con su misma ropa pero bañado y venía  de trabajar se notaba, yo  estaba por decirle que había pasado y si le habían pagado, pero no me dejó hablar, ha pasado algo tan terrible Olga, que no sé si podrás aguantar, no sé cómo empezar y ahí me dijo, me han casado con una mujer, el día uno que me perdí me emborraché me habían pagado mi sueldo y me alcé una borrachera y resulta que al día siguiente desperté con otra mujer a mi lado y con una libreta y papeles de matrimonio, la desperté y le dije que ha pasado me dijo estamos casados, es terrible me dijo, no sé qué hacer me debes ayudar,  no me denuncies, yo le dije no, no lo haré , si quieres vete yo me quedaré con mis hijos y lloraba echa una estúpida, el empezó a reír a mandíbula batiente, mientras yo me deshacía en llanto, entonces me dijo:  jajaja, quería que entiendas que hay cosas peores que gastarse el sueldo, creo que perdí el sentido cuando escuché esto, hoy aún lo tengo tan claro como si hubiera sucedido ayer. Lloré tanto que no supe de nada ni nadie, los  chicos me vieron durmiendo, me imagino pero se pusieron a jugar calladitos.

          Cuando desperté me acordé de los niños, sin comer, sin bañar, nada de nada, pobres, estaban sentaditos los tres jugando en la cama, tu padre llegó y llegaba siempre con unos tres o cuatro amigotes entre ellos el chanchero, hijo de una chola que tenía una chanchería sobre la plaza España al lado de la farmacia eso se repetía al menos dos veces por semana, yo no salía por nada del cuarto de los niños, ahí jugaba con ellos, ya te dije que la Cruza se fue, cuando pasó esto, no había un peso ese mes, ellos  bebían reían, cantaban, una noche yo tuve que ir a la cocina y estaba tu papá con un amigo afuera del living, yo pasé saqué algo  y me entré pero me quede´ escuchando, él le decía Nanhy tienes que  tener más cuidado, estos se emborrachan mucho y puede pasar una desgracia, tienes una mujer  joven , hijos que pueden hacerles algo, me entiendes? le decía, si , decía el otro cayéndose de borracho, ya no los traeré, quédate  donde quieras , no hagas esto.   No sé quién era pero le agradecí dentro de mi corazón, como que cada vez venían menos seguido y al final ya no vinieron, aleluya!!!   Mi calvario tenía que terminar, ya no podía más, un día salí por ahí dando vueltas con los tres, y pasé por donde el Manuel, y tenía el piso de arriba vacío, entré  y le rogué que me lo alquile, le dije tu sabes que te pagaré, me conoces, etc. creo que hasta lloré.   Me dijo bueno, no te daré adelanto porque tengo que pagar la otra casa y me dijo, ya ven nomas, casi muero de alegría, me presté plata para el traslado, y nos fuimos donde el Manuel, primero vivimos arriba, poco a poco verás cómo fue, ahí naciste. Le dije a la dueña de los claveles arregle con mi esposo yo no sé nada, y me trasladé con cuatro cosas y solo para cocina teníamos un anafe de bomba a kerosene, me quiero morir cuando me acuerdo y un hornillo chiquito eléctrico, por ahora tenía que pensar en ordenar  la vida porque pronto llegaría el bebé.

Aimée en la Plaza Españá año?

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